viernes, 12 de junio de 2009

Frustración

Tus amigos se gradúan, tú sigues estancado en la universidad, tu novio ya no puede serlo porque sigue clavado con su exnovia, tus amigos son geniales pero les cuesta demostrar apoyo emocional, tu familia te dice que todo está como debe mientras tú te sientes la persona más imbécil del planeta, te la has pasado haciendo sentir bien a todos y dando todos los consejos que eres incapaz de aplicar mientras tu poco a poco acumulabas basura en tu sistema, y el colmo, eres incapaz de definir qué quieres y lo que sientes ahora que todo se dirige a un embudo de frustración.

Así estoy yo en éste momento y sé que, aunque en circunstancias diferentes, todos hemos pasado una o varias veces por situaciones similares, sin embargo y también puedo reconocer que es por elección propia que todo esto terminé por minar mi sistema psicológico y fisiológico.

Todos elegimos enojarnos o reírnos ante las circunstancias que nos pone enfrente nuestra labor en el planeta, elegimos dejar que otros nos alteren o ignorarlos para nuestro bien, pero también seré honesta al decir que no es fácil razonar absolutamente todo al grado suficiente de desechar todas las cosas negativas.

Es muy fácil decir “no te enganches”, “ignóralo”, “va a pasar”, “el tiempo dirá” y efectivamente, todas estas sugerencias sirven, y cuando sales del bache te das cuenta de que el mundo no se acaba hasta que tu lo decides, pero un poco de drama siempre te va a recordar lo mal que te puedes pasar y lo mucho que debes trabajar para extender las etapas en que te sientes muy bien.

Sentir frustración es lo más terrible del mundo y quizás las personas son las que más la provocan porque no podemos controlarlas, no podemos ni siquiera preveer su comportamiento porque el ser humano es errático y complejo. Así que por lo menos yo he entendido que no vale depender de las personas y tampoco aferrarse al paradigma de lo que es uno mismo, porque de ser así, en el momento que aquel que quieres, y por tanto influye en tu vida, o tu mismo sufran un cambio, la persona que creías ser se quebrará en mil pedacitos. Es mil veces mejor ser flexibles, descubrir un poco de lo que somos cada día, de manera que seamos, si no más felices, por lo menos más sanos.

1 comentario:

BezagoX dijo...

Es tan terrible esto del bloggeo...